Grandes rutas: El Camino del Cid
Hoy os invitamos a un viaje literario siguiendo las huellas de Rodrigo Díaz de Vivar en otra de nuestras grandes rutas: El Camino del Cid. Este viaje nos lleva de noroeste a sudeste (de Vivar del Cid, Burgos a Orihuela, Alicante) siguiendo el recorrido literario e histórico del Cid Campeador.
Historia del Camino
Rodrigo Díaz de Vivar, el Cid Campeador, fue un caballero burgalés que en su destierro dejó el reino de Léon y Castilla junto a un pequeño grupo de fieles. Tras trece años de incursiones y avatares llegó a Valencia y se la conquistó a los musulmanes en 1094 para acabar sus días allí gobernando como príncipe. Sus hazañas fueron escritas por un poeta anónimo a finales del siglo XII o principios del XIII.
Hay varios viajeros que ya desde el siglo XIX han intentado seguir las huellas del Cid Campeador. En los años ’80 surgieron propuestas de cicloturistas como Luis Markina o Juan Antonio García Barrachina, sobre itinerarios siguiendo el Camino del Cid.
En 1996 la Diputación de Burgos crea un camino senderista de 18 km que será la semilla del Camino actual.
Finalmente, en 2002, se incorporan al proyecto las diputaciones provinciales de Soria, Guadalajara, Zaragoza, Teruel, Castellón, Valencia y Alicante, y se constituye el Consorcio Camino del Cid, que, con base en Burgos, comienza en marzo de 2003 a desarrollar el actual Camino del Cid.
Un viaje literario
El Camino del Cid está fundamentalmente basado en el Cantar del mío Cid, que no siempre coincide con el recorrido real realizado por Rodrigo Díaz de Vivar. Pero se decidió seguir este itinerario dada la escasez de datos que se tienen del camino histórico, por las pocas e inexactas fuentes de que se dispone.
El Cid hizo, en su camino hacia Valencia, numerosas incursiones que se incluyen en el Camino.
En el trazado de las rutas se han unido los topónimos del Cantar, enlazándolos, si fuera necesario, con lugares relacionados con el Cid histórico, o, en su defecto, con lugares de interés histórico medieval.
El Camino
Existen diferentes opciones para realizar el Camino: a pie, en BTT, en coche o moto, o haciendo cicloturismo, que es la modalidad en la que nos vamos a centrar.
El recorrido, que está señalizado, se divide en 10 rutas tematizadas de entre 66 y 362 km unidas entre sí. En total suman unos 1.400 km en senderos y 2.000 km de carreteras, en su mayoría secundarias con poco o muy poco tráfico (entre todas las modalidades).
Los caminos elegidos para BTT son muchas veces de buen firme y sin dificultades técnicas, lo que permite añadir un toque de aventura al viaje cicloturista, abandonando el asfalto.
En el itinerario pasamos por 8 Patrimonios de la Humanidad (la Catedral y el Camino de Santiago, en Burgos; el Mudéjar Aragonés, en las provincias de Teruel y Zaragoza; el Tribunal de las Aguas y la Lonja de la Seda (en Valencia); la Fiesta de la Mare de Déu de la Salut, en Algemesí (Valencia); y el Palmeral y el Misteri, ambos en Elche) y 41 poblaciones declaradas Conjunto Histórico y/o Artístico.
En el viaje nos adentramos en entornos rurales con escasa población y pueblos pequeños, pasando por más de 70 espacios naturales protegidos por la Red Natura 2000 (los sabinares relictos del Arlanza (Burgos), el río Duero (Soria), el Parque Natural del Alto Tajo (Guadalajara), las lagunas de Gallocanta (Zaragoza), la Sierra del Maestrazgo (Teruel y Castellón), la Albufera de Valencia o el Palmeral de Elche (Alicante), etc.). Pasamos también por más de 200 castillos, atalayas y edificaciones defensivas en diferentes estados de conservación.
El salvoconducto es una credencial que permite al viajero ir consiguiendo sellos a lo largo del Camino, un bonito recuerdo de los lugares visitados. Pero también ofrece descuentos en alojamientos a lo largo del recorrido, y, puntualmente, existen promociones y regalos para el viajero acreditado.
Las rutas cicloturistas
Todo el recorrido está señalizado y se divide en rutas temáticas con diferentes longitudes. Para el itinerario cicloturista existen 5 rutas principales, un ramal y cuatro anillos, que nos permiten crear trazados según nuestros intereses y el tiempo del que disponemos:
Itinerarios principales
- El Destierro: desde Vivar del Cid (Burgos) hasta Atienza (Guadalajara) – 362 km – Dificultad: Baja
- Tierras de Frontera: desde Atienza (Guadalajara) hasta Ateca-Calatayud (Zaragoza) – 258 km – Dificultad: Baja – Media
- Las Tres Taifas: desde Ateca-Calatayud (Zaragoza) hasta Cella (Teruel) – 309 km – Dificultad: Media
- La Conquista de Valencia: desde Cella (Teruel) hasta Valencia (Valencia) – 221 km – Dificultad: Media
- La Defensa del Sur: desde Valencia (Valencia) hasta Orihuela (Alicante) – 250 km – Dificultad: Media – Baja
Ramales
- Ramal de Álvar Fáñez: Desde Villaseca de Henares o desde Castejón de Henares (Guadalajara) hasta Guadalajara (Guadalajara) – 65 km – Dificultad: Baja
Anillos
- Anillo de Gallocanta: Ruta circular desde Daroca (Zaragoza) – 78 km – Dificultad: Baja – Media
- Anillo de Montalbán: Ruta circular desde Calamocha (Teruel) – 145 km – Dificultad: Media
- Anillo del Maestrazgo: Ruta circular desde Rubielos de Mora (Teruel) – 244 km – Dificultad: Media
- Anillo de Morella: Ruta circular desde La Iglesuela del Cid (Teruel) – 104 km – Dificultad: Media
En la web del Camino del Cid www.caminodelcid.org podemos encontrar toda la información detallada sobre los recorridos. Cada ruta dispone una pequeña referencia al argumento de El Cantar, de folletos descargables, tracks, topoguías cicloturistas con mapas y rutómetros, alojamientos, oficinas de turismo, y puntos de emisión y sellado del salvoconducto.
Conclusiones
Este viaje literario nos permite recorrer caminos por los que pasara Rodrigo Díaz de Vivar, el Cid Campeador, según relata el Cantar el mío Cid. Es un Camino señalizado, lleno de historia, cultura, con un indiscutible aire medieval, que discurre por zonas rurales y despobladas, rodeado de naturaleza.
Nosotros llegamos a él desde la TransCAM en nuestro viaje a la playa siguiendo el Camino Natural del Tajo, aunque sería muy fácil de enlazar partiendo de Alcalá de Henares y llegando al Ramal de Álvar Fáñez en Guadalajara.
Si te gustan los viajes que no sólo atraviesen lugares de belleza singular, solitarios, con naturaleza e historia, si no que además tengan una historia que contar no dudes en recorrer otra de nuestras grandes rutas: El Camino del Cid.