¿Cómo diseñar una ruta?
Muchas veces nos surge la necesidad o las ganas de planear una ruta y la pregunta de ¿cómo diseñar una ruta? A nosotros nos gusta mucho la planificación, ya que es el primer paso para comenzar un viaje. El método que nosotros utilizamos para diseñar la ruta es el siguiente:
1. Establecer condiciones de la ruta
Lo primero que tenemos que conocer es aproximadamente lo que queremos hacer, punto de inicio y fin, puntos de interés por los que debe pasar la ruta, la dificultad según las personas que vamos, si la ruta es lineal o circular, distancias y desniveles, tipo de firme, o cualquier otra característica que puede estar marcada por nuestras limitaciones o intereses.
2. Buscar información de rutas existentes
Una vez establecidos los criterios que queremos seguir en nuestra ruta, buscamos si ya existen rutas que se parezcan. Podemos buscar por nuestros criterios o que discurran por nuestra zona de interés. Para ello podemos utilizar libros, en buscadores de internet o en páginas de rutas, como wikiloc.
3. Dibujar la ruta
La ruta que hemos establecido la dibujamos ahora en Google Earth, lo que nos permite medir distancias y desniveles. Sobre esta base es sobre la que trabajaremos y la que iremos modificando según nuestros intereses y los datos más concretos que obtendremos en los pasos siguientes.
4. Revisión detallada aérea de la ruta
Para comprobar que la ruta parece factible utilizamos un visor de mapas que permite visualizar los mapas con mayor detalle, en nuestro caso usamos el SigPac. Revisamos las zonas más conflictivas que pueden presentar problemas de continuidad o que tienen peor definición en Google Earth.
5. Comprobar con visor de ruta
Otra forma de revisar los caminos, aunque generalmente sólo los asfaltados, que resulta muy útil para comprobar tanto el camino a recorrer como los caminos que salen cuando nos desviamos del camino principal, es Street View de Google Maps. Es una herramienta muy potente limitada por lo comentado anteriormente. Aunque hay que prestar atención a la fecha en que se han realizado las fotos (aparece en la parte inferior de la imagen), ya que no siempre son muy actuales.
Y con esto tenemos una ruta que debería ser bastante aceptable para realizarla en bicicleta y que se ajuste a nuestros intereses. Aún así, siempre puede aparecer alguna sorpresa inesperada que no se puede prever y que también es parte de la aventura (una cuesta inciclable, una barrera, un camino privado, etc.). Ya sólo nos queda pasar el archivo .kml de Google Earth a .gpx para pasarlo al GPS, lo que se puede hacer fácilmente con un conversor online como gpsvisualizer.com, coger la bici y salir a comprobar la ruta que hemos diseñado.
Y tú ¿cómo diseñas tus rutas?